Precios desde
$450 mxn
Tipo de terapia: Masajes
Esta terapia usa: Talco, crema, aceites, piedras
Trata Padecimientos de tipo: Muscular, anímico, digestivo, crónico
Es para: Mejorar el funcionamiento de los órganos internos y reducir el estrés y la tensión.
Tiempo de Tratamiento: 45 min.
Costo de Terapia: $3,150 mxn
Índice
La Reflexología se trata sobre aplicar presión y masajear ciertas áreas de los pies, las manos y las orejas. Esta terapia alternativa promueve el alivio de algunos síntomas de enfermedades y te puede ayudar a disminuir los niveles de estrés y tensión haciendo que te sientas tranquilo y relajado.
Está basada en el principio de que zonas específicas de los pies, llamadas reflejas. Las reflejas se encuentran conectadas a diferentes partes del cuerpo por medio del sistema nervioso. El objetivo principal de la reflexología es estimular el flujo energético y enviar señales a todo el cuerpo enfocándose en las partes donde hay tensión.
Si te interesa este tipo de terapia te invito a que sigas leyendo para que sepas en qué casos se utiliza, ¿qué tipos existen? y sobre todo qué puedes esperar luego de una sesión con un reflexólogo especialista.
La reflexología está ligada a varios beneficios potenciales, pero solo algunos de ellos han sido evaluados en estudios científicos.
Hasta ahora hay evidencia de que esta terapia alternativa ayuda a:
Además de esto las personas que reciben este tratamiento han reportado que los ha ayudado a:
Esta rama de la medicina alternativa está enfocada en recuperar el balance del cuerpo de forma holística. Lo hace por medio de la estimulación de puntos específicos en los pies, manos y orejas que se activan presionándolos y masajeándolos.
Existen varias teorías sobre cómo el proceso de la reflexología funciona en el cuerpo. A continuación te las presentamos:
Esta teoría se construye con base en una investigación que demuestra que existe una relación neurológica entre la piel y los órganos internos y que el sistema nervioso completo se ajusta a los estímulos. De acuerdo con esta teoría la presión que se aplica en los pies, manos u orejas envía mensajes calmantes desde los nervios periféricos en las extremidades hacia el sistema nervioso central, que como resultado provoca que el nivel de tensión en el cuerpo se ajuste. Esto trae como consecuencia que nos relajemos y que los órganos internos y sus sistemas pasen a estar en un estado óptimo de funcionamiento.
Esta teoría sugiere que el dolor es una experiencia subjetiva creada por nuestro cerebro. El cerebro hace esto en respuesta a experiencias sensoriales de dolor, pero también puede funcionar de forma independiente y crear dolor como respuesta ante factores emocionales o cognitivos. Nuestro estado de ánimo y factores externos como el estrés pueden afectar nuestra experiencia del dolor. La reflexología puede reducir el dolor al ayudar a lidiar con el estrés y mejorar el estado anímico.
Esta teoría afirma que nuestro cuerpo alberga una energía vital que es la que mantiene todos los órganos funcionando de forma adecuada. En este caso se considera que si el estrés no se trata se convierte en congestión energética, lo que causa insuficiencias en el cuerpo y, como resultado de esto, enfermedades. La reflexología ayuda a que la energía vital no se estanque y siga distribuyéndose por todo el cuerpo para que todo funcione a la perfección.
El cuerpo está dividido en 10 zonas verticales. Cada zona va de los dedos de las manos y de los pies hasta la parte superior de la cabeza. Por ejemplo, si estás de pie con las manos apoyadas en los muslos entonces tus pulgares y tus dedos gordos de los pies conforman la zona 1. De igual forma los índices con el segundo dedo del pie forman la zona 2 y así hasta los meñiques. Esta teoría sugiere que cada órgano, arteria, músculo, etc. se encuentra en alguna de estas 10 zonas y puede ser accedido por medio de los puntos de presión en los pies o en las manos. Como la primera teoría, la del sistema nervioso central, esta asegura que los caminos entre los puntos de presión y los órganos internos están conectados por medio del sistema nervioso.
Existen diferentes tipos de reflexología que tienen distintos enfoques entre sí dependiendo de lo que estés buscando.
Se realiza en ambos pies, comenzando por los puntos reflejos del pie izquierdo y luego los del derecho. La presión se aplica con el pulgar en puntos específicos dependiendo de lo que se busque tratar y este contacto es ininterrumpido. La presión se dosifica para no causar molestias y adaptarse a la sensibilidad de cada paciente.
En este tipo de tratamiento el enfoque de los pies cambia dependiendo del lado del cuerpo. Por ejemplo, el pie izquierdo está ligado a las emociones y el pie derecho a la parte biológica, es por esto que se inicia con el lado izquierdo, ya que generalmente son las emociones las que causan los desequilibrios biológicos.
En este caso los puntos reflejos que se estimulan son los que están presentes en las manos. Esto estimula determinados órganos, glándulas o partes del cuerpo que envían señales por el sistema nervioso hasta el cerebro para que éste envíe al órgano dañado una señal de autosanación.
A diferencia de los otros tipos de reflexología, la facial no estimula puntos reflejos sino puntos nerviosos. El gran beneficio de este tipo de terapia es que la estimulación nerviosa es más fuerte que la refleja, ya que el rostro está ubicado cerca del cerebro y las señales viajan más rápido hacia este. Este tratamiento se utiliza mucho para beneficios estéticos pues devuelve tersura a los músculos faciales y mitiga las líneas de expresión.
Este método se originó en Taiwan y es uno de los más utilizados por los especialistas asiáticos. Se practica enfocándose en la estimulación y no en la relajación, por lo que la presión que se utiliza es firme y a veces es necesario usar instrumentos como pequeños cilindros de madera. En este estilo de reflexología se usa una crema llamada “Fluss Balsam” que inhibe cualquier tipo de fricción en el pie para que se puedan realizar movimientos rápidos y fluidos que te beneficien.
Este método también se conoce como el método universal de reflexología. Es el tipo más común de tratamiento en occidente y se enfoca en relajar al paciente y balancear los sistemas de su cuerpo por medio de masajes y estimulación de puntos reflejos en manos y pies.
Este método es similar al Ingham, pero en vez de utilizar las manos para estimular los puntos reflejos se utilizan piedras que son calentadas con vapor. Cada piedra tiene una temperatura diferente, lo que promueve la buena circulación sanguínea hacia los puntos reflejos.
Una sesión típica de reflexología dura alrededor de 45 minutos a una hora y comienza con una entrevista sobre tu salud y tu estilo de vida. Tu reflexólogo te preguntará sobre tu historial médico para estar al tanto de las enfermedades que puedas presentar y también te preguntará qué es lo que esperas obtener con este tipo de terapia alternativa. Te va a pedir que te quites los zapatos y los calcetines antes de pasarte a una silla reclinable muy cómoda o a una mesa de masaje. El terapeuta llevará a cabo una examinación inicial de los pies antes de comenzar. Para hacer la experiencia más placentera para ti te hará un pequeño calentamiento que consiste en activar puntos de presión desde los dedos hasta el talón y luego la presión aumentará un poco para distinguir qué zonas son las que están acumulando presión o necesitan ser tratadas.
La reflexología no duele, pero sí puedes sentir molestia en algunas partes sensibles de los pies y de las manos. La sensibilidad varía de persona en persona y el reflexólogo ajustará la cantidad de presión a la que a ti te resulte cómoda.
El número de sesiones que vas a necesitar depende de la condición que se esté tratando. Este tema lo hablarás con el reflexólogo cuando te presente el plan de tratamiento diseñado especialmente para ti.
Una vez que la sesión termine tus pies se sentirán más calientes de lo normal y experimentarás una sensación de calma y relajación general. Es posible que te dé un poco de sueño, así que te recomendamos que al acudir a tu primera sesión no tengas prisa de llegar a otro lugar después.
Algunos pacientes pueden experimentar efectos secundarios como mareos, dolores de cabeza, sensibilidad en los pies y cambios de humor marcados, pero esto no debería durar más de un día.
Consulta Desde
$450 mxn
Consulta Hasta
$800 mxn
Número de Consultas
7
Precio de Tratamiento
$3,150 mxn
Material: N/A
Medicamentos: N/A
Toma en cuenta que: El precio de la terapia dependerá de qué método utilice el reflexólogo, ya que los diferentes tipos de tratamiento pueden necesitar instrumentos específicos para brindarte una experiencia completa que te ayude a alcanzar un bienestar general.
Actualmente este tipo de terapia alternativa no está regulada en Latinoamérica, pero gran parte de los profesionales de esta área se certifican en asociaciones extranjeras como lo son la Junta Americana de certificación de reflexología que exige a los especialistas haber realizado un curso presencial de 110 horas que cumpla con los parámetros establecidos en su página así también como presentar un examen de conocimientos sobre reflexología aplicada a pies y otro aplicado a manos en el que su puntuación final sea igual o mayor a 75%.
Por lo general la reflexología es muy segura, incluso para aquellas personas con condiciones de salud serias. No es invasiva y es muy cómoda de recibir, pero de todas formas si tienes algunos de los siguientes problemas de salud es necesario que consultes primero con tu médico:
Si estás embarazada es importante que le digas al reflexólogo antes de la sesión, ya que algunos puntos de presión en las manos y en los pies pueden inducir contracciones. Si quieres usar la reflexología para inducir el parto es necesario que lo consultes primero con tu médico pues existe un riesgo de parto prematuro.
