Precios desde
$1,900 mxn
Tipo de terapia: Medicina Alternativa
Esta terapia usa: Tanques de oxígeno, gas oxígeno, oxígeno líquido, cámaras presurizadas, mascarillas, tubos nasales
Trata Padecimientos de tipo: Respiratorio, crónico, mental, trastornos del sueño, cardiovascular
Es para: Mejorar los niveles de oxigenación en la sangre, evitando que las funciones del cuerpo se deterioren
Tiempo de Tratamiento: 3 sesiones
Costo de Terapia: $9,500
Índice
La terapia de oxígeno, conocida como Oxigenoterapia, es un tratamiento que proporciona oxígeno adicional al cuerpo para brindarle una mejoría inmediata y que puede beneficiarlo a largo plazo. Se utiliza sobretodo por personas con trastornos respiratorios que no pueden obtener suficiente oxígeno de forma natural.
Esta terapia permite que las personas que la reciben obtengan una mejoría en sus ciclos de sueño, sus niveles de energía y en su calidad de vida en general. Si te interesa conocer más sobre cómo funciona y qué efectos tiene sobre el cuerpo, te invitamos a que sigas leyendo.
La Oxigenoterapia se prescribe para personas que no pueden obtener suficiente oxígeno por sí mismas, por lo que es increíblemente beneficiosa para pacientes que presentan enfermedades como:
Además de ayudar a quienes sufren de estas afecciones, la terapia de oxígeno también tiene los siguientes beneficios.
Todos los tejidos y órganos del cuerpo necesitan oxígeno, por lo que la falta de éste puede ser prejudicial para la salud, sobretodo para el sistema cardiovascular. Los niveles bajos de oxígeno pueden provocar presión arterial alta, hipertensión pulmonar, insuficiencia cardíaca y ataques cardíacos.
La oxigenoterapia reduce el riesgo de sufrir estas afecciones pues aumenta la saturación de oxígeno en la sangre, lo que trae como consecuencia que los pulmones puedan satisfacer de manera más adecuada las necesidades de oxígeno del cuerpo.
Sin oxígeno suplementario, muchas personas con EPOC y otras afecciones respiratorias crónicas no pueden ejercitarse muy bien por sí mismas. Esto se debe a que el esfuerzo físico aumenta la cantidad de oxígeno que el cuerpo necesita, lo que obliga a los pulmones a trabajar más y dificulta la respiración.
Estas son algunas de las principales formas en las que la oxigenoterapia favorece la realización de actividad física:
Cuando este tratamiento se combina con un programa de entrenamiento, amplifica los beneficios físicos, especialmente la capacidad de hacer ejercicio durante períodos de tiempo más prolongados, lo que ayuda a que el metabolismo mejore y también lo haga la eficiencia de los músculos. La oxigenoterapia puede ayudar a prevenir una variedad de otras complicaciones que pueden resultar de la inactividad, incluidas las enfermedades cardíacas y la diabetes.
La oxigenoterapia puede ayudarte a pensar, razonar y recordar mejor las cosas. Esto se debe a que los niveles bajos de oxígeno en sangre pueden tener efectos sutiles en el cerebro que los suplementos de oxígeno pueden corregir. Cuando la saturación de oxígeno en sangre es baja, puede hacer que te sientas aturdido, fatigado y menos alerta. Esto puede hacer que la vida diaria sea más difícil de manejar y que sea más difícil mantenerse al día con hábitos saludables como el ejercicio.
La terapia de oxígeno puede prevenir el deterioro cognitivo, o al menos evitar que empeore después de que comienza. Algunos estudios incluso sugieren que la oxigenoterapia puede revertir los síntomas del deterioro cognitivo leve, al mejorar el flujo sanguíneo a través del cerebro.
Al evitar que disminuyan los niveles de oxígeno en sangre, la oxigenoterapia previene la hipoxemia nocturna, que puede ser muy dañina para el sistema cardiovascular con el tiempo. Esto también ayuda a sentirse más descansado y alerta cuando la persona se despierta y puede reducir la fatiga diurna. Este tratamiento puede ayudar a prevenir episodios de disnea nocturna.
Tener suficiente oxígeno en el torrente sanguíneo es vital para que nuestro cuerpo mantenga sus funciones básicas. El oxígeno es lo que mantiene nuestro corazón latiendo, nuestros pulmones sanos, nuestros músculos alimentados y nuestro cerebro activo. Cuando el cuerpo no recibe el oxígeno necesario, comienzan a aparecer síntomas que pueden afectar la calidad de vida.
Lo que hace la oxigenoterapia es darle al cuerpo la cantidad de oxígeno que este necesita para funcionar con normalidad. Para determinar si una persona se beneficiará de esta terapia, los médicos tienen que evaluar la cantidad de oxígeno en la sangre arterial. Los niveles normales de oxígeno en sangre arterial se encuentran entre 75 y 100 mmHg (milímetros de mercurio). Un nivel de oxígeno de 60 mmHg o menos indica la necesidad de terapia de oxígeno.
Hay varios tipos diferentes de terapias con oxígeno que se pueden utilizar. Entre ellos encontramos:
El gas oxígeno se puede almacenar en un tanque portátil. Esto se denomina sistema de gas comprimido. Se puede usar un concentrador estacionario, si el paciente necesita de terapia dentro del hogar y se puede llevar un tanque de oxígeno más pequeño, para usarlo fuera de éste. Los tanques más pequeños se pueden utilizar junto con dispositivos de conservación de oxígeno para que el suministro dure más tiempo. En este caso el oxígeno se suministra en pulsos, no de forma continua.
El oxígeno líquido, como el gas, también se puede almacenar en un tanque portátil. En esta presentación está más concentrado, por lo que puede caber más oxígeno en un tanque más pequeño. Esto es especialmente útil para las personas que son muy activas, pero hay que tener en consideración que se evaporará si no se usa de manera oportuna. Estos tanques son recargables.
Los concentradores de oxígeno son menos portátiles que las otras opciones pues son dispositivos que toman el oxígeno de la habitación y lo concentran para uso terapéutico, eliminando otros gases naturales. El oxígeno se distribuye desde el tanque a través de un tubo. Ingresa a los pulmones a través de tubos nasales, una máscara facial o un tubo que se inserta directamente en la tráquea de la persona.
La Oxigenoterapia hiperbárica es diferente a los otros métodos. Las personas que se someten a este tratamiento respiran oxígeno puro en una habitación o en una cámara presurizada. En las cámaras hiperbáricas la presión de aire aumenta tres o cuatro veces los niveles normales, incrementando la cantidad de oxígeno que llega al tejido del cuerpo. Este tipo de suministro de oxígeno se usa a menudo para tratar heridas, infecciones graves o burbujas de aire en los vasos sanguíneos.
Para comenzar la terapia de oxígeno es necesario que tu médico te dé una receta para que se te suministre. Una vez que tengas tu receta te explicarán con qué frecuencia debes usar la terapia. También te dirán la tasa de flujo o la cantidad de oxígeno que necesitarás por minuto. Es fundamental que sigas todas las instrucciones específicas de tu médico.
Dependiendo de la enfermedad que se esté tratando, puede ser posible que tengas que someterte a sesiones de terapia de oxígeno por un par de días o incluso meses. Todo dependerá de lo que diga tu médico y de los síntomas que presentes.
Muchas personas que necesitan oxígeno suplementario viven vidas normales y activas. En muchos casos la oxigenoterapia ayuda a facilitar la actividad, aumenta la resistencia y disminuye la dificultad para respirar. Incluso las personas que necesitan terapia continua debido a enfermedades crónicas, pueden llevar una vida normal. Una vez que una persona aprende a manejar el equipo de oxígeno, la terapia no tiene por qué limitar su rutina.
La primera vez que te sometas a la terapia de oxígeno es probable que te marees e incluso sientas un poco de fatiga, ya que tu cuerpo tiene que acostumbrarse a recibir el nuevo flujo de oxígeno que se le está administrando. Estos síntomas no deberían durar más que un par de minutos. Después de que tu cuerpo se aclimate sentirás cómo tu energía comienza a subir y tu claridad mental mejora.
Consulta Desde
$800 mxn
Consulta Hasta
$2,600 mxn
Número de Consultas
5
Precio de Tratamiento
$9,500
Material: Incluido en la terapia
Medicamentos: No se utilizan
Toma en cuenta que: El precio del tratamiento de terapia de oxígeno hiperbárico es mucho más elevado que el que utiliza gas oxígeno u oxígeno líquido, ya que se lleva a cabo en un hospital y dentro de una habitación o cámara especialmente diseñada para ese tipo de terapia.
La terapia de oxígeno debe ser recetada por un médico, es decir que este especialista debe haber estudiado Medicina y contar con su cédula profesional. En México la Secretaría de Educación Pública es la que entrega estas cédulas, así que puedes consultar la de tu médico aquí, si necesitas corroborar la información.
Si bien un médico tiene que darte la receta, el tratamiento puede ser llevado a cabo por cualquier profesional del área de la salud.
Algunos pacientes que usan oxigenoterapia pueden tener efectos secundarios que incluyen:
Los pacientes deben hablar con el médico sobre cualquier efecto secundario que estén experimentando.